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domingo, 20 de enero de 2019

Serendipia. La Cura para la dislexia. Capítulo VIII "Divergente en un mundo Convergente"





Resulta extraordinario y  complejo, que ocurran las características y condiciones adecuadas para que un planeta, situado en cualquier maravilloso lugar de este inmenso Universo, pueda albergar algún tipo de vida.  Por lo que nuestro hogar, La Tierra, presenta unas características excepcionales, en su ubicación, en su forma y con una inteligencia fascinante, basada en la armonía y en el deseo de perpetuar la fuente inagotable de vida.

“Y sin embargo, a pesar de ser consciente de lo que significa haber nacido aquí y existir, nunca sentí, que en este bello lugar, estuviera mi hogar”



Cuando mis ojos de niña despertaron a la razón y supe discernir que era humana,  pude apreciar  la grandeza en la que me veía envuelta.  También descubrí, que los  humanos,  a pesar de ser los únicos afortunados de poseer el prodigioso don de  la consciencia y la inteligencia, parecían perdidos.   


No entendía nada, había tanto amor, compasión, ternura y tanta luz en la esencia mágica de la humanidad.  Sin embargo, divagábamos en una misión absurda, intentando mostrar nuestra valía y diferencias entre nosotros y con respecto a otras especies, mostrando lo oscuro, lo tosco, el desdén y también el desprecio hacia la naturaleza, quien nos dio y sustentaba nuestras vidas. 

Creo que comencé a sentirme extranjera de La Tierra nada más salir del vientre de mi madre, cuando por amor, enfundaron cada parte de mi cuerpo por separado con aquellas frías ropas,  arrebatándome la posibilidad de hacerme una bolita, como hacen todos los cachorros al nacer, ávidos de sentir el calor de su propia piel y el de sus madres. 


Durante cada minuto, de cada hora, de cada día, se me impuso una realidad convergente, de líneas rectas, de sueños en blanco y negro, de posibilidades silenciadas y alas rotas. Yo, que nací en un cuerpo capitaneado por una mente de colores y curvas imposibles, de olas purpura y plata, de noches de música y luna, de días soleados, de atardeceres acuarela.


Durante toda una vida, sumergida y atrapada en el sentir humano, que converge en el culto a las ideas de estructuras rígidas, jerárquicas. Un sentir humano que camina deslumbrado por la absurda riqueza de lo material y que se desviste a zarpazos, de la sabiduría de la forma de un cuerpo y una realidad, que amorosamente fue diseñada para sentir y participar de lo natural. 


Por dentro, en mi pecho, siempre he sentido la necesidad de enfrentarme a esa realidad y a voces divergir. Aunque todo, quedó anclado en mi corazón, encadenado a mis ganas, escondido en un rincón de años de patio sin amigos, de tardes de azotea, horizontes y soledad. 



A mí alrededor era todo tan frío, tan antinatural, tan despectivo de mi, de dónde venía  y a dónde deseaba ir, que no supe hacer otra cosa que esconderme. Y en mi refugio, poco a poco albergué la creencia de que no pertenecía a  este planeta.    En algún momento pensé que, sin duda estaba loca, pero no soy la única que no ha encontrado en el rostro humano, su propio reflejo.


La historia, nos ha mostrado un gran número de seres extraordinarios, que no se escondieron, que se rebelaron contra toda norma, nos regalaron su auténtico yo y derramaron su verdad para que el resto del mundo pudiera deleitarse con ella.  Algunos fueron tachados de chiflados, otros antisociales y a otros los llamaron genios. 


"Divergentes que cada día, despiertan con el reto de no desvanecerse entre las aguas de la imposición de la lógica, de lo común y  a pesar de ello, gracias a su resplandor, entusiasmo y perseverancia,  iluminan a la humanidad”


Afortunada, he tenido la suerte de conocer a una interesante variedad de esas maravillosas personas  que, totalmente coherentes,  viven y desempeñan  roles sociales acordes al sentir general y sin embargo, me han confesado que desde niños, esconden su verdadera naturaleza, una naturaleza contraria que les hace sentir que no pertenecen a este lugar. 


Y ahora, me encuentro aquí, en este parámetro del camino, dejándome  abrazar por la inmensa belleza y amor que también ha surgido del pensamiento lógico y convergente.  Aunque, cada día fantaseo pensando, que si la mayoría de humanos que habitan y han habitado el mundo, hubieran compartido el sentir divergente y creativo, en estos momentos, estaríamos disfrutando de una realidad distante a como la conocemos y quizá, podría sentirme en casa.




domingo, 13 de enero de 2019

Serendipia. La Cura para la dislexia. Capítulo VII "El Silencio Que Habla"




   En algún momento de nuestra evolución, de la mano de la consciencia y la inteligencia humana, absortos por la exquisita singularidad que nos abrazaba,  surgió en nosotros la necesidad de crear belleza si un objetivo práctico, solo por amor a lo hermoso,  El Arte. 


El amor al arte está en todas partas, no es solo el privilegio de unos cuantos afortunados que disfrutan de mentes creativas y talentosas. Cada uno de nosotros, también tú, sentimos el impulso de expresar, desde la sensibilidad, la verdad acerca de nuestra insólita, bella y particular manera de sentir el mundo real o imaginario.

En una ocasión, llevé el coche al taller y tras varios días fui a recogerlo. El mecánico, con gran pasión me contó acerca de la avería y su arreglo. En pocos minutos, con palabras complejas y a la vez sencillas, me dio una clase magistral sobre el sistema eléctrico.  Aquel entusiasmo, sin duda capturó mi atención, aunque lo que realmente quedó grabado en mi memoria para siempre, no fue su evidente pasión por la mecánica. 


Tras las explicaciones, me acompañó para entregarme personalmente el vehículo. Cuál fue mi sorpresa que además del arreglo, había dedicado parte de su tiempo en acicalar su aspecto, por fuera y por dentro.  Cuan minuciosa  limpieza de aquella máquina de transporte, que envuelta de chapas color negro,  rodaba y rodaba, hacía ya más de diez años, por las calles de Granada. En el interior, cada centímetro de cada rincón presumía de un aspecto jovial, impoluto, que se emulsionaba con memorias de aroma a nuevo.

Y el exterior, antes pálido, tosco y yermo, ahora alegraba la vista con curvas sinuosas que reflejaban los destellos del sol, como la mar serena refleja el haz de luz de la luna en la noche. 


Había dulzura, amor y orgullo en la expresión del  rostro de aquel hombre, al entregarme su obra de arte. Sus  manos rudas, agrietadas por la edad, la grasa y el frío, acariciaban el lomo del coche, como Mozart acariciaría su piano tras una hermosa composición. Y yo, sonreía por fuera y por dentro,  cómplice de aquel delirio por la magia de un automóvil, que funcionaba a la perfección y ahora también, lucía hermoso. 

Eso es  Arte, elevar a lo sublime lo extraordinario y también lo sutil, lo sencillo, incluso lo tosco y árido.  El Arte está con nosotros, en todas partes, es como el ligero  murmullo de la brisa, que ronronea acariciando nuestro interior, conmoviendo el sentir humano, que más allá de lo material, de la forma, es capaz de ver la esencia armoniosa del mundo. 

Hay quien a retazos, disfruta durante la vida de la visita del Arte, y otros afortunados, que nacen, viven y mueren abrazados por Él.  Ellos son los hijos del talento,  los portadores de corazones abstractos, los que miren donde miren, perciben la alegría de la existencia y sus infinitas posibilidades creativas, amorosas. 


El Arte de la Escritura


“La letra escrita, ya sea literaria o simplemente comunicativa, es Arte que se derrama a través de las palabras, es, el ser humano que en silencio habla”

Mira como justo en este momento, yo estoy aquí, en silencio, escribiendo ideas, sensaciones y sentimientos que surgen en mi mente, se endulzan en mi corazón y emergen  a través de la palabra escrita. Y a la vez, qué hermoso y  sobrecogedor saber, que ahora tú estás ahí, recibiendo mi verdad a través de las palabras que te hablan en silencio.  

 “Si  pudierais verla como yo la contemplo, como yo la siento, como yo la amo”
Para la mayoría, en la escritura, solo surge lo hermoso, cuando la unión de palabras debidamente escritas, compuestas y ordenadas expresan un mensaje sutil y delicado. Y sin embargo, para mi mente, que se eleva desde los colores, el movimiento, la música y la maravillosa singularidad del caos divergente, la escritura, en cualquiera de sus formas, se sitúa, entre uno de los medios más bellos  que he encontrado, para extender mi condición y mi amor. 


“Es por ello, que se rompe incurable un cachito de mi esencia, al escuchar a un hijo del talento decir, que detesta leer y escribir”

Pero es normal que los hijos del talento, rehúsen disfrutar de este manantial de creación y delirio.  La letra escrita, se impone a todos por igual, como un instrumento de expresión, rígido, carente de alma en su forma y en sus estructuras. Justo lo opuesto a lo que significa la simbiosis entre el talento y el Arte;  belleza sin limitaciones, sin un objetivo implícito, solo belleza.  


Los hijos del talento necesitan aprender, comprender y manejar la escritura desde las posibilidades del Arte.  Debemos permitirles, que el silencio que habla, les cuente las más bellas historias a través de un lenguaje escrito libre, sin el yugo de las normas que de sobra sabemos, les asfixia, les tortura y les arrebata la pasión de amar la letra escrita. 

Debemos de admirar, premiar y fomentar las composiciones que los hijos del talento crean,  cuando escriben con esas maravillosas letras de colores, ordenadas al antojo de la creatividad, y que bailan dispares al son de la música que resuena en sus corazones y en sus mentes.


¿Es que no lo veis?
Es puro Arte que se expresa a través del  movimiento, es puro amor que impregna de alegría y de vida letras yermas, que lánguidas permanecen dormidas unas junto a otras, esperando un alma llena de melodía, que las despierte y las sacuda de su eterno letargo.  

Que levante  la mano, quien estuviera  dispuesto a corregir ni una sola coma de los versos de Lorca y pretendiera, curar la locura de una mente vibrante y hermosa, a la cual, también se le antojaba jugar con las palabras escritas y mostrarlas rebeldes, indómitas. 

Federico García Lorca, un hijo del talento que mostró su verdad,  a pesar de saber que mentes mediocres no entendían la alegría de ser libre y que hablaría al mundo, por siempre, desde su eterno silencio.


Poema Al  Alba

Mi corazón oprimido
siente junto a la alborada
el dolor de sus amores
y el sueño de las distancias.

La luz de la aurora lleva
semilleros de nostalgias
y la tristeza sin ojos
de la médula del alma. 

La gran tumba de la noche
su negro velo levanta
para ocultar con el día
la inmensa cumbre estrellada.

¡Qué haré yo sobre estos campos
cogiendo nidos y ramas
rodeado de la aurora
y llena de noche el alma!

¡Qué haré si tienes tus ojos
muertos a las luces claras
y no ha de sentir mi carne
el calor de tus miradas!

¿Por qué te perdí por siempre
en aquella tarde clara?
hoy mi pecho está reseco
como una estrella apagada.


domingo, 30 de diciembre de 2018

Serendipia. La Cura para la dislexia. Capítulo VI "Cerebros de Alto Rendimiento"


“La vida, en cualquiera de sus manifestaciones, se origina y permanece como el mayor y más fascinante de los retos”

!Qué afortunada! encontrarme aquí, junto a ti, en medio de tan colosal desafío, presenciando como la inteligencia con la que están concebidos nuestros cuerpos, nos proporciona, la noble y asombrosa cualidad de aprender durante cada segundo de nuestra existencia. Consciente e inconscientemente, nos instruimos  a través de la totalidad de la envoltura humana con un único fin,  afrontar la provocación que suscita la vida.


Con esta  grandeza, la que reside en la complejidad e inteligencia de la forma, cada uno, irá extendiendo su experiencia de vida y desliando las incógnitas  de su cuerpo y su mente.

Creemos que en este viaje, el de experimentar la vida, es mejor caminarlo  rodeado de circunstancias favorable.  Eso es lo que deseamos para nuestros hijos, nuestros seres amados y para nosotros mismos ¿Verdad? Pues la realidad, es justo lo opuesto. Lo que ha servido a la humanidad para avanzar, es la adversidad. 


Si bien, es magnífico que gracias a circunstancias amables, podamos asimilar nuevos conocimientos,  no hay que renegar ni temer a los contratiempos que nos llegan.  En ellos, la oportunidad de aprender y avanzar hacia un estado de consciencia mayor, se multiplica exponencialmente.  Ante la adversidad, se dispara nuestro intelecto,  se elevan las capacidades, agudizan los sentidos y se despierta la sabiduría innata que mora en nuestros enigmáticos cuerpos. 



Ahora lo veo con claridad, nunca fui una víctima dentro de un panorama contrario creado por adultos que no  comprendían de mi naturaleza, lo que realmente sucedió es que la adversidad, poco a poco me convirtió en una valiente protagonista.  Protagonista de una aventura de vida repleta de desafíos sí, pero aquellos retos, aquellos desafíos, empujaron a mi intelecto a expandirse en proporciones mayores. 


Los que me conocen dicen que soy una optimista empedernida, y aunque no les quito la razón, de lo que ahora estoy hablando no es una cuestión de optimismo, es un hecho demostrado científicamente y que se conoce como "Neuroplasticidad"

“Para intentar encajar en el paradigma que se me impuso,  aventuré a mi cerebro a un profundo y constante entrenamiento”



Aquel continuo adiestramiento, aumentó la disposición de mis células, que ávidas de nuevas posibilidades,  mejoraron y enriquecieron las redes neuronales que residían en el entramado de mi joven cerebro. Y mejor aún, el conjunto de actividades que tuve que desempeñar, despertaron he hicieron prosperar, los potenciales que no heredé pero que se me exigía desarrollar, para encajar con las destrezas de lo que se imponía como normal.


  “En la brecha que se manifiesta, entre lo que realmente somos y lo que unos a otros nos permitimos ser, surge una luz inagotable, una posibilidad virtuosa, benevolente, que desafía a la  naturaleza para que avancemos más allá de nuestras creencia, nuestros límites”

Me siento muy agradecida, pues mi travesía hacia un estado mayor de desarrollo, no concluyó en el crecimiento ante la adversidad y el entrenamiento extra que ello suscitó.  Ahora continúo mejorando, exactamente igual que lo haces tú,  tú que  también viste tu infancia teñida con los colores y las sombras de otros.  


Hasta hace poco, no fui consciente que desde que nacimos, hemos vivido sumergidos en una realidad ordenada a través de mentes que se desarrollan siguiendo patrones y estructuras constantes y lógicas. Justo lo opuesto a nuestra evidente realidad divergente, una realidad libre y abstracta.



¿No te das cuenta?  Siempre albergaste un intelecto sobresaliente, predispuesto a la superación. Cada día, desestructurabas tus propias creencias para intentar crecer a través de los patrones de los demás y aun así, siempre perduró tu esencia dentro de ti, irrefutable, fuerte, inmortal, sensible, amorosa.  Exactamente igual que lo hacen nuestros hijos, los hijos del talento.

Ven, quiero que contemples conmigo y te maravilles de otro acontecimiento extraordinario que yo ahora puedo ver.  


No estamos solos, observa con agradecimiento, como la ciencia, en su infinita osadía por desvelar los misterios que nos rodean,  está desplegando todo su amor, su potencial en nosotros.



Personas salpicadas alrededor del planeta, desde hace décadas, dedican su trayectoria profesional y en muchos casos personal, en dilucidar a cerca del entramado que reside en nuestras diferencias intelectuales.  Es tal su determinación por contribuir al desarrollo de nuestras capacidades lingüísticas, que incluso  crean terapias,  juegos, aplicaciones, programas informáticos e increíbles fórmulas que sirven  para que podamos ampliar nuestros horizontes.


“Nunca, jamás, volverás a sentirte pequeña o pequeño ante la misteriosa y fascinante travesía de la vida.  Ahora, sabes que desde que naciste, además de fluir en esta aventura con las atribuciones que te concedió la naturaleza, estás  sumergida, sumergido en  un entrenamiento extraordinario que promueve la mejora  de tus posibilidades y te convierte en un ser portador de un Cerebro Excepcional, un Cerebro de Alto Rendimiento” 🌼🌼🌼🌼....




domingo, 23 de diciembre de 2018

Serendipia. La Cura para la dislexia. Capítulo V "La Liberación del Perdón"


   

“El perdón es un acto unilateral, interno, propio, en el que nadie puede participar solo tú, es puro amor hacia ti mismo, hacia ti misma.  Con él te desnudas del pasado, del drama personal de ser una víctima y permites, que tu verdadero yo por fin   florezca”
Antes de reencontrarme con migo misma  necesité disolver las creencias internas que continuaban haciéndome sentir  que estaba rota y que era imperfecta. Sin embargo, primero debía de hacer algo profundamente valioso  "Perdonar".   Aunque para serte sincera, los ecos del ayer y sus dolorosas experiencias, continuaban inundando mi cabeza de historias pasadas y mi corazón de sentimientos amargos.



Y aun así, la inteligencia suprema e irrefutable que todos albergamos en el interior, me susurraba una y otra vez  que para avanzar debía de hacerlo, debía perdonar.   

¿Pero cómo conseguir olvidar y perdonar?

La consciencia, que surgió en los seres humanos y las capacidades intelectuales que nos diferencian de otros seres, no me iban a permitir disipar, de un soplo,  la nube negra que oscureció  mi niñez y dirigió el rumbo de mi vida.   Sin embargo, lo que sí que pude hacer es construir, a través del perdón, un nuevo escenario en esos recuerdos.

💚

💙  “Y con la semilla del amor  colmé de  comprensión aquellos momentos  en los que fui  incomprendida"  💜   
 ♥️                                    💙                       💗

El camino del perdón es complejo y curioso pues, aunque sabes, que perdonar es hermoso y necesario, te sobrevienen sentimientos contrarios que te hacen dudar.    Yo también dudé y en algún momento creí que al perdonar, estaba justificando los comportamientos incorrectos e inapropiados que otros tuvieron hacia mí. 


Pero no, ahora sé que perdonar no es justificar,  de lo que se trata es de dejar a un lado los miedos, los rencores y entender, que los adultos que construyeron mi pasado, lo hicieron de la única manera que sabían hacerlo.  Comprender que mi familia, educadores, entorno social e incluso aquel maestro de lengua y literatura, que nunca consiguió  creer en mí,  estaban condicionados por la cultura, las circunstancias,  las doctrinas del momento y sus propios demonios internos.  


De la mano del perdón, pude ver que ellos, con los conocimientos y experiencias que previamente habían tenido, me amaron,   atendieron y orientaron lo mejor  que pudieron.  Justo lo que intento hacer  yo cada día  con mi hija, mi  pareja, mi familia y  todos los seres que me rodean y me acompañan en la aventura de la vida, aunque a veces, también me equivoque y sin desearlo, les haga sufrir.   

"Si bien,  perdonarles a ellos fue un acto de amor y liberación,   ocurrió algo mucho más elevado y trascendental,  tuve una noble revelación;    descubrí que también,  podía perdonarme  a mí"


Cual dulce sensación recorrió todo mi cuerpo físico y abstracto cuando, al perdonarme,  todos aquellos muros que desde mi niñez se elevaban cada vez más altos e impenetrables, se derrumbaron y pude verme por primera vez a mí, como la  mar tras una terrible tormenta,  sutil, serena, amable y bella. En aquél mágico instante, la brisa,  que llegaba fresca y con aromas de libertad desde el horizonte del perdón,  me devolvió la alegría de vivir sin miedo, confiando en mí, en mi propia valía y también, en la valía de los demás.


Ahora, tras mi despertar,  camino orgullosa de mi propia naturaleza, creyendo en ella, sabiendo que nada ni nadie puede marchitar mis talentos, mis posibilidades. Soy libre y he surgido en este plano de la existencia para disfrutar de la vida a través de mi cuerpo y mi inteligencia. 


Ahora camino ilusionada, conociendo de la naturaleza de los demás, creyendo en ellos, sabiendo que nada ni nadie puede marchitar sus talentos, sus posibilidades, porque son libres y han surgido en este plano de la existencia para disfrutar de la vida a través de la inteligencia que albergan en sus cuerpos.


“Recuerda que el perdón es un acto unilateral, interno, propio, en el que nadie puede participar solo tú, es puro amor hacia ti mismo, hacia ti misma y también hacia los demás.  Con él te desnudas del pasado, te alejas con paso firme del drama personal de ser una víctima y permites, que tu verdadero yo por fin florezca”